El camionero contó en su denuncia el burdo motivo que le dieron federales para llevarse $20 millones y dejarle $11 millones

Había salido de Tucumán con 31 millones de pesos para ir al Mercado Cooperativo de Guaymallén, Mendoza, a comprar frutas y verduras. En eso, el camionero pasó por San Juan y, en el control fitosanitario de Vallecito, en Caucete, lo paró un grupo de policías federales para un chequeo de documentación. Así fue que los uniformados descubrieron que llevaba semejante cantidad de dinero y le dieron una llamativa razón para sacarle 20 millones de pesos y dejarle el resto: que podía circular sólo con 11 millones de pesos en efectivo y que lo otro iba a ser decomisado. El camionero siguió viaje, pero le contó lo sucedido a su jefe, el dueño de la empresa de transporte, quien fue al Juzgado Federal N°2 a buscar la plata, cosa que las autoridades desconocían. Eso consta en la denuncia, según informaron fuentes calificadas, la cual desencadenó la investigación del escándalo que involucra a efectivos de la Agencia Regional Cuyo de la Policía Federal.

Investigación en la que ayer ya fueron indagados dos sospechosos (el oficial Matías Barbeito y Marcos Altamirano) y hoy será el turno de otros dos (Gabriel Puca y Matías Vega). No es lo único, ya que, tal cual reveló anoche 0264 Noticias, la Justicia ordenó la detención de otros cinco policías.

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El camionero había pasado por el control de Vallecito el jueves pasado, en la madrugada, y, luego de que le quitaran el dinero, el propietario de la compañía de transporte, al tanto de la situación, viajó inmediatamente con otro de sus empleados para averiguar el destino de la plata. Como en la Justicia desconocían el accionar de los implicados y de la plata, el empresario transportista puso la denuncia.

En su relato, contó que el camionero iba con el vehículo vacío, para cargarlo con frutas y verduras, y que llevaba los 31 millones de pesos en tres bolsas. En eso que lo paran, a unos 20 metros del control, el conductor de la movilidad dijo que vio unos seis policías, brindó ciertas características de algunos de ellos y del vehículo en el que se desplazaban.

Ahí fue que los federales le dijeron que no podía circular con tanta plata y, por eso, le retuvieron 20 millones de pesos, de acuerdo a su explicación. Además, la víctima contó que se labró un acta, pero que no le dieron copia, indicaron las fuentes. Si sucedió de esa manera, lo que se confirmará con el avance de la causa, los uniformados debieron contactarse con el Juzgado Federal, recibir la orden y llamar a testigos para que observen el procedimiento que se estaba llevando adelante, explicaron fuentes judiciales.

Tras la denuncia, el fiscal Francisco Maldonado realizó el requerimiento de instrucción y el juez Leopoldo Rago Gallo dispuso la detención de los primeros efectivos. Los cuatro están en la mira como presuntos autores del delito de robo, el cual tiene penas que van de un mes a 6 años de prisión, agravado “cuando quien ejecutare el delito fuere miembro integrante de las fuerzas de seguridad o policiales”, lo que eleva la escala “en un tercio en su mínimo y en su máximo”, según establece el Código Penal.

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De ese primer grupo, ayer fueron indagados Barbeito y Altamirano, los que son representados legalmente por Gustavo De La Fuente. El abogado señaló que ambos, en líneas generales, explicaron que salieron en un operativo hacia el control de Vallecito dado que tenían el dato de que podía circular un auto que transportaba droga. Así, manifestó que estuvieron esperando a dicho rodeado y, mientras, realizaron controles de rutina, pero que no pararon ni requisaron a ningún y que, mucho menos, le sacaron plata a un conductor.

De hecho, indicaron que individualizaron un auto que pensaron que podía ser el que buscaban, lo siguieron, pero que, después de una persecución, le perdieron el rastro. Es más, el profesional señaló que el grupo de uniformados dejó constancia en la Agencia Regional de que partían a ese operativo.

De esa manera, como era de esperar, los implicados se desligaron de cualquier maniobra delictiva. Sin embargo, consta en el expediente que una persona del control fitosanitario vio al camión detenido entre 30 a 40 minutos, que le llamó la atención que no hubiese testigos y que observó al grupo de policías y a quien sería el conductor, al igual que notó que unas bolsas estaban a lado del camión. Esta última descripción coincidiría con la denuncia del camionero, dado que llevaba los 31 millones de pesos en tres bolsas.

De la Fuente también defiende a Puca y Vega, los que serán indagados hoy. Anoche, este medio también dio a conocer en exclusiva que las autoridades judiciales dieron la orden para detener e indagar a otros cinco uniformados. El número total (nueve efectivos) se corresponde con el acta que se dejó en la Agencia de los policías que salieron a hacer el operativo. Así, tanto Maldonado como Rago Gallo buscan determinar qué nivel de participación tuvieron los implicados o si alguno de ellos no tuvo nada que ver con lo que sucedió.

De esa manera, los involucrados podrán ejercer su derecho de defensa a través de sus respectivas declaraciones indagatorias, aunque no están obligados a dar sus versiones y eso no significa una presunción en su contra.

De acuerdo a las fuentes, en los allanamientos, hasta el momento, no hubo secuestro de dinero, pero sí de los celulares, computadoras y notebooks de los sospechosos, las que serán peritadas para establecer si hubo alguna comunicación incriminante, detallaron las fuentes.