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2022: el año que vivimos con una "súper inflación"

Los índices de inflación crecieron durante todo el año. En los últimos meses creció la esperanza con el programa de Precios Justos.

2022: el año que vivimos con una "súper inflación"
viernes 30 de diciembre de 2022

La inflación siempre es un tema de preocupación para los argentinos. Nuestro país lleva más de una década con una inflación creciente que alarma. Durante este 2022, la suba de precios se fue acelerando y algunos analistas llegaron a pensar que, el cierre de año, sería con una cifra de tres dígitos aunque sí terminaremos el 2022 prácticamente rozándola. El gobierno nacional asegura que algunas medidas económicas de Massa hicieron que se estanque y exista una luz de esperanza.

¿De qué hablamos cuando hablamos de inflación? Básicamente del aumento generalizado en los precios de los bienes y servicios de una economía durante un periodo de tiempo. Es un tema más que importante porque esto se ve reflejado en las compras cotidianas, en la proyección de futuro, crecimiento económico e influye también a la hora de tomar la decisión de realizar inversiónes.

Argentina X 2

Argentina duplicó el nivel de los precios en un año y esto se debe a varios factores:

  • inercia
  • emisión monetaria
  • falta de un plan antiinflacionario
  • factores vinculados a la guerra de Ucrania.

Y esto no es todo, porque en el país también se pueden sumar otros ítems como:

  • los cambios de ministros
  • además de la falta de una visión única

Todo este combo influyó en estos índices inflacionarios.

En los primeros meses del año y hasta el mes de junio, el nivel general del Índice de precios al consumidor (IPC) aumentó 5,3% mensual. Con esto, acumuló una variación de 36,2% y, en la comparación interanual registró un incremento del 64%.

Luego de este primer balance del año, durante un fin de semana, llegó la renuncia intempestiva del ministro de Economía, Martín Guzmán, quien venía recibiendo golpes de distintos sectores del kirchnerismo, incluida la propia vicepresidenta que no apoyaba las medidas económicas que había propuesto el hombre que llegó de la mano de Alberto Fernández. Silvina Batakis fue simplemente un ave de paso, que no contaba con peso ni cintura política. Duró 24 días en el cargo e incluso, se enteró que habían decidido cambiarla en un vuelo desde EE.UU que la traía al país. 

SuperMassa

El terreno para Sergio Massa se vino preparando desde el momento en el que se conoció la renuncia de Guzmán. Incluso fue el primer nombre que se barajó antes de conocer el de Batakis. Durante los primeros tres meses su gestión, la inflación siguió creciendo hasta escalar un 20,8%. Así, desde enero hasta octubre la inflación acumulada fue de 76,6% y fue cuando empezaron los análisis pesimistas y, no por eso menos realistas, de que la inflación llegaría a tres cifras a fin de año.

Cabe recordar, que el nuevo ministro de Economía asumió su cargo en medio de una agria disputa entre Fernández y su vice, Cristina Kirchner. De todas formas, llegó con poderes de superministro para hacer un duro ajuste fiscal, detener la emisión monetaria, sumar reservas al Banco Central y, sobre todo, bajar la inflación, como exigía el FMI.

Esto hizo que, además de superministro, Massa sea un gran malabarista. Entre sus medidas, trató de destinar fondos extraordinarios a la ayuda social y negociar con el sector exportador para que liquiden ante el Banco Central los dólares que reciben por sus ventas al exterior. Porque, entre los varios problemas económicos que tiene el país, la falta de reservas internacionales era un punto importante.

Durante los dos últimos meses del año, llegó una luz al final del camino. La inflación no logró llegar a los tres dígitos como se esperaba, pero sí estar al borde de tocarla. Según el gobierno esto fue gracias al programa de Precios Justos y la desaceleración que se registró noviembre con la suba de los precios en alimentos.

Según el INDEC “el Nivel general del Índice de precios al consumidor (IPC) representativo del total de hogares del país registró en noviembre una variación de 4,9% con relación al mes anterior” “Los bienes registraron una variación de 4,5%, mientras que los servicios tuvieron una variación de 5,8% con respecto al mes anterior”.

Para muchos, la luz de esperanza con la inflación se debe a el programa de Precios Justos. El secretario de Programación Económica, Gabriel Rubinstein, afirmó: “Precios Justos es una herramienta útil para procurar llegar a una inflación del 4% en meses venideros, y hacia 3% para fines del año próximo”.

En este 2022, la inflación no llegó a ser lo que se esperaba. Aún no podemos hablar de una guerra inflacionaria ganada tal cual lo anunciaba el propio presidente de la Nación, pero sí, que en cada argentino hay una luz de esperanza frente a la crisis.

Argentina cuenta con un índice de pobreza de 43,1% y de indigencia de 8,1%. Según el INDEC el valor de la canasta básica llegó a $145.948 hasta el 20 de diciembre del 2022. Y, para el 2023, se espera un año político y no apto para hacer muchos reajustes. Podemos pensar que las medidas económicas sigan, bajen los valores y Massa active sus poderes de superministro. 

También está la posibilidad de que el ministro de Economía concrete su plan económico sin incluir reajustes. Y, quedará ver, cómo la quita de subsidios en los servicios impactará de manera directa en la casta familiar y el bolsillo de la gente.

Los factores económicos juegan a favor o en contra a la hora de emitir un voto. Y, en lo político, hay sectores que ven a Massa como posible candidato a presidente para el 2023. ¿Pasará de superministro a superpresidente?

 

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