La perrita agredida podría perder el hocico

La perrita que todavía no tiene nombre y a la que cariñosamente le llaman Bebé, está de buen ánimo y hasta se anima a jugar un poco. El pequeño can al que le ataron un elastiquín para estrangular la zona del hocico ni se imagina que puede llegar a perder el hocico.

"Come todo blando y casi líquido", contó Jésica quien la rescató en Chimbas, en la calle Luna y Oro.

Los profesionales que la atendieron en un primer momento plantearon un panorama poco duro para la perrita ya que podría perder el hocico, su pequeña nariz, que prácticamente ya tiene atrofiada.

Al realizarle la limpieza y desinfección de la zona pudieron advertir lo serio de sus lesiones. Es por eso que por ahora está con calmantes y antibióticos hasta el miércoles que determinarán si pueden operarla. 

La intervención quirúrgica costará unos 4000 pesos por lo que seguramente los rescatistas pondrán una urna para quienes quieran colaborar con los gastos médicos.

M. Sosa