El "cementerio" de chatarra

El pasado 12 de febrero comenzó un proceso histórico en la provincia de San Juan de descontaminación, desguace y compactación de vehículos con problemas judiciales que se encontraban en el depósito judicial del departamento 9 de Julio, con el objetivo de reducir la contaminación que generaban; reducir la superpoblación del parque automotor y darle una disposición final a los autos, motos y bicicletas que se encontraban allí.

De esta manera, 13.000 vehículos que habían sido radiados por la Justicia de Faltas pasarán por este proceso para dar un cierre definitivo producido por 1.276 autos; 8.883 motos y 5.481 bicicletas que permanecían en 9 de Julio desde hace cinco años.

La finalidad de esta actividad es la reducción de costos, ya que mantener la chatarra en el predio implica un gasto para el Estado de aproximadamente $20 millones anuales. “La meta es dejar ese costo en $3 ó $4 millones”, había dicho el ministro de Gobierno, Emilio Baistrocchi, en el comienzo del proceso formal de compactación.

Actualmente hay más de 8.500 autos y 23.000 motos en las instalaciones del depósito. La mayoría se encuentra allí tras haber sido secuestrados por la Justicia de Faltas, ya sea por:

• irregularidades
• no contar con los documentos necesarios para circular por las calles
• haber protagonizado un siniestro vial
• causas penales

Los propietarios de los vehículos radiados deberán ponerse al día y regularizar su situación ante el Juzgado de Faltas interviniente, pagar las multas aplicadas y poner en regla la documentación correspondiente. Después de cumplir con todos los requerimientos, se lo autorizará a retirar su vehículo en el depósito de 9 de Julio, donde deberá presentar la resolución que lo habilite a llevarse su auto, moto o bicicleta.

El proceso puede durar días, semanas o meses. El problema es que algunos propietarios de dominio, por alguna razón, no regularizan nunca su situación por lo tanto, su vehículo queda para siempre en el depósito expuesto al sol, humedad, lluvia, granizo o cualquier contingencia climática.

El plazo máximo que tienen para retirar su vehículo es de seis meses. Pasado ese plazo la Justicia de Faltas de San Juan deberá determinar el destino de esos rodados.

Hay autos que permanecen de tres semanas a un mes en 9 de Julio, mientras que otros llevan allí más de 20 años y el óxido los va desgastando. Según indicaron el auto que más tiempo lleva en esas instalaciones está allí desde 1992, es decir hace 27 años.

El depósito vehicular se encuentra en el departamento 9 de Julio, a unos kilómetros de la villa cabecera del departamento. En total son ocho hectáreas que albergan más de 8.500 autos y 23.000 motos. Comenzó a funcionar en julio del 2015 y tiempo después las playas de remoción de Pocito, Rivadavia y la ex Bodega Cavic fueron unificadas y los rodados que se encontraban allí fueron trasladados a las actuales instalaciones.

Según comentaron a 0264Noticias los responsables del depósito, más de 23 motos ingresan por día pero sólo 4 ó 5 son retiradas. En el rubro de autos, la relación ingreso-egreso es similar aunque a menor escala.

El predio mantiene el piso de tierra y está dividido por sectores. Por un lado se encuentran los vehículos que tienen problemas con la Justicia de Faltas; otro sector está destinado a aquellos rodados vinculados a causas penales. Por último, se encuentran aquellos provenientes de comisarías que, por lo general, protagonizaron accidentes de tránsito.

Al suelo del predio se le agregó una capa de material salitroso para que los vehículos tengan mayor agarre a la superficie.

Los amantes de los autos lamentarán que piezas de importación sean víctimas del óxido, las lluvias y el sol, factores perjudiciales para el exterior de cada auto.

Recorriendo las instalaciones se puede observar que hay por ejemplo vehículos como:

• Chrysler 300
• BMW Serie 3
• Suzuki Baleno
• Mitsubishi Lancer
• Mercedes Benz
• Mini Cooper

Por el lado de las motos, desde una Kawazaki Ninja hasta una DKW ocupan el amplio espacio destinado para los vehículos de dos ruedas.

En los próximos días se cumplirán tres meses del comienzo del proceso de compactación. Según la secretaria de Gobierno, Fabiola Aubone, el procedimiento se desarrolla dentro de los parámetros previstos en la licitación. El tiempo máximo para completar los trabajos es de 180 días (seis meses).

Según explicó Aubone ya se compactó la totalidad de las bicicletas, el 50% de las motos y sólo restan 500 autos de un total de 1.300.

Cada día que se compactan vehículos se labra un acta de constatación de los trabajos realizados en la jornada. Ese acta es firmada por la empresa, el comisario a cargo del depósito y un veedor del Ministerio de Gobierno.

“La intención es poder limpiar estos depósitos o cementerios de vehículos porque son altamente nocivos para la población y para el ambiente. El año pasado se sancionó una ley que nos permitió llevar adelante esta destrucción histórica después de tantos años de depósito sin mover ninguno de los vehículos que habían sido trasladados ahí. Se está trabajando en los informes de todo lo que queda para que sea periódico. Que la remoción de un vehículo ante una falta, tenga el tiempo necesario para que el titular pueda cumplir con la carga pública y recuperar su rodado. Si esto no sucede, el vehículo será destruido”, explicó Aubone.

“No podemos como Estado mantener estos depósitos eternos. Estos vehículos están absolutamente deteriorados. El más nuevo está desde 2013 y el más viejo desde 1992. En un clima tan complejo y a la intemperie es difícil que se mantengan en condiciones”, remarcó la secretaria de Gobierno.

“Hay personas que recuperaron sus autos y motos. Aproximadamente 100 titulares de dominio interesados pudieron hacerlo”, confirmó la funcionaria.

Matías Gónzalez - Infografía: Andrés Gómez Fá