Celeste, la embajadora reflexiva, empática y con proyectos para el crecimiento permanente

Es publicista pero siempre está en movimiento y en busca de nuevos conocimientos. Por eso, también decidió estudiar Psicología y ya está en el tercer año de la carrera. Celeste Sánchez tiene 28 años y está llena de proyectos. La embajadora de Sarmiento se define a sí misma como una persona compleja y en constante construcción.

La joven ayuda a asociaciones proteccionistas de animales y fue parte de la Fundación Hilda, que ayuda y apoya a chicos de bajos recursos de la provincia. Sueña con poder cumplir sus proyectos personales y metas, recibirse y superarse día a día.

Celeste quiere ser embajadora de San Juan “para ser la portavoz de las mujeres sanjuaninas que se sientan identificadas con nuestros mensajes. Para seguir empoderando a las mujeres a través de nuestro ejemplo e inspirar a todo aquel que escuche. Enseñar que las mujeres podemos mostrarnos desde donde lo elegimos, que somos diferentes y eso nos hace únicas”.

Celeste se refiere a Sarmiento como un pueblo muy unido. “Nos apoyamos entre todos. La juventud de Sarmiento está creciendo un montón”, asegura.

Para ella, la educación es fundamental. Cuenta que a los sarmientinos les cuesta mucho acceder al estudio en la Capital. Su deseo es que las instituciones vayan hasta Media Agua y brinden nuevas carreras, cursos y talleres que les sirva para crecer dentro del departamento.

La joven publicista se considera una defensora de los derechos de las mujeres y asegura que la lucha tiene que ser colectiva. “Nos tenemos que unir como un grupo de mujeres, querernos entre nosotras, escucharnos, tolerarnos”.

Respecto de los cambios que se han introducido en esta edición de la Fiesta Nacional del Sol, cree que el gobierno “ha escuchado a la sociedad que pedía un cambio. Nosotras estamos en una etapa de transición”, opina. 

Su proyecto representa a los apicultores de Sarmiento. La idea es poder conseguir una máquina sacheteadora que permita nuevas formas de envasado y packaging para la producción de miel.

Celeste afirma que tanto ella como el resto de las embajadoras viven estos días con mucha intensidad, descubriendo un mundo nuevo. “Es un aprendizaje no sólo grupal sino también personal”, asegura.

Le gustaría transmitirle a los demás la misma empatía que, admite, practica día a día.

Mirá la entrevista: 

Agradecemos a Café Tres Cumbres - Sirio Libanés

Danisa Páez Oruste