El Papa Francisco aboga por el fin de la guerra en su mensaje de Navidad: las personas no quieren armas sino pan
En su mensaje de Nochebuena y Navidad, abogó por un alto al fuego en Belén, denunciando la lógica inútil de la guerra.
El Papa Francisco impartió la bendición Urbi et Orbi desde el balcón de la Logia central de la Basílica de San Pedro donde expresó en su mensaje de Navidad que la guerra es “un viaje sin meta, una derrota sin vencedores, una locura sin excusas “.
“Decir “sí” al Príncipe de la paz significa decir “no” a la guerra, y esto con valentía, a toda guerra, a la misma lógica de la guerra, un viaje sin meta, una derrota sin vencedores, una locura sin excusas”. Añadió que para decir no a la guerra, se tienen que acabar la producción de las armas.
"Pero para decir “no” a la guerra es necesario decir “no” a las armas. Porque si el hombre, cuyo corazón es inestable y está herido, encuentra instrumentos de muerte entre sus manos, antes o después los usará.
Desde la Basílica de San Pedro, el Sumo Pontífice remarcó su claro rechazo a la guerra en Israel, destacando que los corazones de los fieles están con Belén, a pesar de las difíciles circunstancias que enfrenta la región. La decisión de celebrar las festividades navideñas en Belén, ubicada en la Ribera Occidental ocupada por Israel, es un acto simbólico en medio del conflicto entre el país y el grupo terrorista Hamás.
El Papa instó a un alto al fuego inmediato y abogó por la reconciliación en la región. Resaltó el contraste entre el nacimiento de Jesús y el deseo de poder, fama y gloria que caracteriza al mundo actual. En su mensaje, denunció el uso de la fuerza y la idolatría del consumismo, llamando a los creyentes a no ver a Dios en términos paganos.
El mensaje del Papa Francisco busca inspirar la reflexión y la acción concreta para buscar la paz en una región asolada por el conflicto, recordando a los fieles que el verdadero significado de la Navidad reside en valores como la paz, la solidaridad y el amor al prójimo.
