Incendios en Chile: la cifra de muertos ascendió a 99

El presidente de Chile, Gabriel Boric, anunció este domingo un devastador balance de 99 muertos a causa de los incendios forestales que azotan la región de Valparaíso, en el centro del país. El Servicio Médico Legal (SML) ha ingresado un total de 99 personas, de las cuales 32 están identificadas, y se han realizado 25 autopsias, según informó la entidad en un comunicado. Boric advirtió que esta cifra aumentará significativamente.

Las autoridades consideran esta emergencia como la mayor catástrofe natural desde el terremoto de 2010, que dejó 525 muertos y miles de heridos en el sur de Chile.

Boric, quien decretó el estado de excepción en la zona el viernes para movilizar recursos, llegó personalmente este domingo a la región para evaluar en terreno la magnitud de la tragedia.

La alcaldesa de Viña del Mar, ciudad fuertemente afectada, informó que el Municipio maneja un catastro provisional de 372 personas desaparecidas, proporcionando una idea impactante de la magnitud de la tragedia.

Según el último informe de la Corporación Nacional Forestal, hay al menos siete incendios activos en Valparaíso, siendo el de mayor magnitud el de la Reserva Lago Peñuelas/Las Tablas, que ha consumido cerca de 9.300 hectáreas.

El director del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, Álvaro Hormazábal, indicó que las condiciones climáticas podrían mejorar levemente en las próximas horas, facilitando el combate a los incendios.

Para facilitar las labores de rescate, el Gobierno chileno impuso un toque de queda nocturno en sectores aún no evacuados de Quilpué, Villa Alemana, Limache y Viña del Mar.

El gobernador de la región, Rodrigo Mundaca, informó que se está investigando la posibilidad de que los incendios hayan sido intencionados.

Los testimonios desgarradores de las víctimas y las impactantes imágenes de llamas devorando colinas pobladas llevaron al papa Francisco a expresar sus condolencias, pidiendo oraciones por los afectados.

Los incendios forestales, que comenzaron la semana pasada en medio de una ola de calor extremo, se han intensificado rápidamente, amenazando a miles de personas en la región de Valparaíso. A pesar de un invierno lluvioso, la sequía persistente y la vegetación seca en la zona han contribuido a la propagación rápida de los incendios, exacerbada por un modelo forestal basado en el monocultivo de pino y eucalipto.