Mientras la prensa asegura que actualizaron el protocolo del funeral del rey Carlos III, desde el Palacio de Buckingham anunciaron que reanudará su agenda pública
El rey de Inglaterra, Carlos III, fue diagnosticado de cáncer en febrero de este año.
Los medios de Estados Unidos alertan sobre la salud del rey Carlos III, en pleno tratamiento médico por cáncer, ya que se encontraría peor de lo que ha querido transmitir la Casa Real británica. «Se encuentra muy mal» señalan los principales títulos de los periódicos estadounidenses, incluyendo a «The Daily Beast» y «The New York Post».
Si bien oficialmente se instaló que Carlos III estaba respondiendo muy bien al tratamiento contra el cáncer, la salud del monarca británico se estaría deteriorando progresivamente, a pesar de que este está «determinado a vencerlo» aseguran fuentes de la Casa Real.
Sin embargo, todo indica que Carlos III se encuentra débil y los cercanos al rey estarían abocados a la revisión de los planes para su funeral, como se hizo con su madre, la reina Isabel II.
Tras semanas de dudas sobre su estado de salud, el Palacio de Buckingham anunció que el rey Carlos III reanudará parcialmente su agenda pública a partir de la semana próxima. En un breve comunicado, la Casa Real aseguró que los médicos dijeron estar “muy animados” por el progreso de su tratamiento contra el cáncer.
Su primer compromiso con la reina Camila será una visita el martes a un centro de tratamiento del cáncer, dijo Buckingham, e indicó que en junio la pareja recibirá al emperador Naruhito y a la emperatriz Masako de Japón para una visita de estado.
Desde que en febrero de este año el rey británico Carlos III fue diagnosticado de cáncer, su estado de salud quedó envuelto en un fuerte hermetismo y la Casa Real en una turbulencia que se acrecentó tras el diagnóstico similar que recibió la princesa de Gales, Kate Middleton. En ambos casos no se informó qué tipo de cáncer sufren.
La enfermedad del rey fue anunciada en febrero por el Palacio de Buckingham tras una intervención a la que se había sometido. No revelaron detalles, simplemente la realeza afirmó que no se trataba de cáncer de próstata, aunque sí se supo que viajaba a Londres periódicamente para recibir tratamiento de radioterapia.
El comunicado oficial sobre el regreso a las actividades públicas del rey se dio en momentos donde crecían los trascendidos en la prensa británica sobre una actualización del funeral de Carlos III, el protocolo ‘Menai Bridge’.
Fuente: TN
