MALA PRÁXIS
Caso Julieta Viñales: el médico Babsía ¿Cada vez más cerca del juicio?
El médico que operó a la joven de amígdalas espera la presentación de un recurso extraordinario para volver a apelar el procesamiento que ya tuvo un revés en la Cámara Penal.
Han pasado dos años y siete meses de la muerte de Julieta Viñales. La joven ingresó al quirófano del otorrinolaringólogo Maximiliano Babsía pero tras la intervención quirúrgica Julieta sufrió una descompensación y su estado se agravó, causándole la muerte.
La familia de la joven encaró un largo proceso en busca de justicia, denunciando por mala praxis a Babsía, quien luego resultaría procesado por el juez Eduardo Raed por el delito de homicidio culposo, sin prisión preventiva, en diciembre del año pasado.
Eventualmente, el profesional de la salud apeló el procesamiento a través de su defensa. Recientemente, la Sala Segunda de la Cámara Penal confirmó el procesamiento, por lo que la defensa de Babsía aún puede recurrir a una instancia extraordinaria para revertir el fallo judicial.
La Cámara tuvo en cuenta los informes de los peritos y pruebas para ratificar lo resuelto por el juez Raed.
Ahora, corren los plazos para que Babsía presente el recurso extraordinario en la Corte de Justicia. De no hacerlo, el procesamiento quedará firme y la causa quedará en condiciones de ser elevada a juicio. Dicho plazo vence a principios de la próxima semana.
El caso
El 10 de febrero de 2020 la joven de 18 años ingresó al quirófano de una clínica privada, tres días después recibió el alta médica y regresó a su casa. Babsía le realizó una revisión de rutina y aseveró a la familia que todo marchaba bien.
Pero la situación se complicó y Julieta se descompensó, vomitó sangre y fue trasladada de urgencia al Hospital Marcial Quiroga.
Allí hubo un primer contacto telefónico con su médico quien dijo que "se trataba de una hemorragia postquirúrgica y que en algunos casos es normal". Al otro día la derivaron al Hospital Guillermo Rawson donde fue visitada por Babsía e insistió con que "estaba todo bien".
Pero la madrugada del 16 de febrero sufrió un paro cardíaco y debió ser reanimada. Ahí se constató que era una fisura en la arteria carótida lo que produjo el paro, el tiempo sin oxigenación fue suficiente para que Julieta quedara con muerte cerebral. Finalmente, a las 23:40 del 3 de marzo su corazón dejó de latir.
