Incertidumbre por la tradicional participación sanjuanina en la Feria del Libro de Buenos Aires

Este año, San Juan podría estar ausente en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. Esto se debe a una deuda generada en la última edición, por la gestión anterior, que no habría abandonado el canon correspondiente del alquiler del espacio.

Desde el 2004, la provincia ha tenido su propio espacio en las sucesivas ediciones de la Feria Internacional del Libro con el objetivo de visibilizar y comercializar la producción editorial local. Además, se han llevado a cabo conferencias, charlas, degustaciones y actividades recreativas que han distinguidos a los autores locales en el Pabellón de las Provincias.

Según trascendió en, Diario de Cuyo, esta baja del stand no implicaría la ausencia total de créditos locales en la Feria. La Dirección de Bibliotecas Populares facilitarán el traslado a Buenos Aires de referentes de bibliotecas populares para concretar la compra de material bibliográfico. Este viaje será del 2 al 5 de mayo, con 25 bibliotecas.

La editorial de la Legislatura Provincial estará en uno de los espacios de las bibliotecas legislativas del país. Y, resta confirmar que pasará con editoriales independientes, universitarias (UNSJ / UCCuyo), autores particulares y demás actividades.

La Feria Internacional del Libro de Buenos Aires 2024 se realizará del 25 de abril al 13 de mayo en el Predio Ferial La Rural. Cuenta con una superficie de más de 45 mil metros cuadrados y como todos los años, es visitada por más de un millón de lectores, sumando a más de doce mil profesionales de la industria del libro. En esta edición, contará con la presencia de la escritora Liliana Heker, quien dará el discurso de inauguración; y entre otras novedades a tener en cuenta, tendrá a Lisboa como Ciudad Invitada de Honor.

Mary Muñoz, presidenta de la Federación de Bibliotecas Populares de San Juan, confirmó que la provincia hay 60 bibliotecas, de las cuales sólo el 50% son reconocidas por la Conabip; y hay otro porcentaje menor que deben regularizar su situación legal para que puedan recibir los subsidios. Además, hay que tener en cuenta que, este año, todos los fondos que ingresan son escasos.

La presidenta de la Federación de Bibliotecas también aclaró que se pasó, de 250 mil pesos, a un cupo máximo de 600 mil para cada biblioteca. Y, si el año pasado se compraban unos 150 títulos, este año se llega con suerte a unos 70, dependiendo de la necesidad de cada institución.

Los libros que más se adquieren son para público infantil y juvenil, como, cuentos, novelas, historietas, educativos y recreativos. Las narrativas que más se consumen y las bibliotecas hacen pedidos en esta dirección para atraer a nuevos lectores.

A pesar de esto, las bibliotecas afrontan dificultades para sostener costos, tienen falta de personal y no se sabe cuántos fondos tendrán este año para sus gastos corrientes. Las cuotas societarias no cubren el pago de los servicios mínimos y no se sabe cuánto tiempo van a durar los subsidios.