Iglesia sigue pagando la deuda de Marinero con proveedores

No fue una transición para nada sencilla y a la vista están los resultados. Cuando Jorge Espejo, asumió la intendencia poniendo fin doce años de gobierno de los hermanos Marinero, se encontró con un complejo panorama. El intendente saliente aseguró que dejaba el municipio en orden, con las obligaciones con proveedores cumplidas, con un excedente de dinero suficiente para hacer frente a las obligaciones durante el primer mes de gestión y con cuentas equilibradas.

Sin embargo, al parecer cuando Espejo asumió la intendencia se llevó una ingrata sorpresa: había un saldo negativo en concepto por regalías, había una sobrepoblación de contratados en el municipio y aún mantenía la deuda con proveedores.

El jefe municipal electo puso manos a la obra para dar de baja algunos contratados no previstos para su gestión, solicitó los fondos de emergencia al Gobierno Provincial e inició un rigurosa auditoría para determinar los movimiento financieros de la gestión de Marinero.

“En estos últimos 30 días hemos podido observar un gasto excesivo de dinero. Encontramos un  saldo negativo de $2.700.000 en la cuenta regalías. Esto quiere decir que han emitido cheques sin fondos, algo que no se puede hacer desde una institución pública como lo es un municipio”, manifestó Espejo.

“Hay mucha deuda todavía. Tenemos proveedores golpeándonos las puertas todos los días. Tenemos gente con cheques que no han podido cobrar, tenemos intimaciones judiciales, demandas de personas que se les entregó expediente de planta permanente que se les entregó en mayor y absoluta irregularidad, prácticamente en lo que ha sido falsificación de documento público. Algunos de esos documentos fueron firmados por el anterior intendente (Marcelo Marinero)”, sostuvo el jefe municipal.

Por último, Espejo anticipó que, finalizado el procedimiento administrativo, procederán a efectuar la denuncia contra la gestión anterior. “No debe pasar de febrero”, manifestó el intendente.

Matías González