Los tres femicidios que aún no han sido resueltos

Tres familias esperan por Justicia. Tres mujeres que han sido silenciadas por femicidas. En San Juan, son tres casos en los que un hombre acabó con la vida de su pareja o ex, aún esperan su resolución en vías judiciales.

Demoras por lejanía, retraso de la fecha de juicio o simplemente una investigación que no avanza son algunos de los motivos por los cuales estos tres casos aún no se define.

Celeste Luna

Celeste Luna fue asesinada el 15 de diciembre de 2019. En ese momento, las primeras hipótesis afirmaban que durante un forcejeo con su pareja, el agente de Policía Matías Mallea, recibió un disparo en la cabeza, que acabó con su vida.

Al principio se dijo que estaban “jugando” con el arma. Luego , una versión afirmaba que la joven estaba manipulando el arma y se disparó “accidentalmente”. Pero en el avance de las pericias se demostró que el disparo no coincidía con ninguna de esas dos hipótesis.

La situación de Mallea se agravó cuando el dermotest comprobó la existencia de pólvora en las manos y brazos.

El próximo 15 de diciembre se cumplen dos años del hecho y si bien la causa ha sido elevada a juicio, aún no hay fecha definida y en caso de cumplirse dos años, la prisión preventiva de Mallea alcanzaría el límite. Si el fiscal no pide prórroga, el ex policía podría afrontar el resto del proceso en libertad.

Pamela Rodríguez

El caso de Pamela es quizá el más preocupante. A 18 meses del hecho, su familia no cuenta con los medios para viajar desde Villa Calingasta (donde se produjo el femicidio) hasta la Ciudad y debido a eso, no pueden informarse sobre los avances de la causa e investigación.

Su madre no cuenta con los recursos como para viajar permanentemente a la ciudad y menos para pagar un abogado y de esa manera constituirse en querellante. Además, no posee teléfono así que las posibilidades de poder entablar una comunicación con algún funcionario judicial son escasas.

Por otro lado, familiares de Ángelo Castillo, el femicida, solicitaron la custodia del hijo que este tenía en común con Pamela.

El menor -que al momento del asesinato de su madre tenía tan solo tres meses de vida- se encuentra con la familia de la joven.

Pamela tenía 17 años cuando Ángelo Castillo ingresó de incógnito a su casa y luego a su habitación y aprovechando que estaba dormida, la degolló con un cuchillo.  

Su madre la encontró y la trasladó al centro de salud más cercano pero murió en el camino. Tres meses atrás había dado a luz a su hijo.

Si bien Castillo está detenido y procesado por el homicidio agravado, la causa no ha mostrado avances significativos.

Hilda Tobares

La noche del 18 de diciembre de 2020, Hilda Tobares fue asesinada de 11 puntazos en su casa de Villa Ramos en Chimbas. Fue encontrada por una vecina quien la halló ensangrentada sobre su cama.

Inmediatamente, las sospechas cayeron sobre Roberto Barahaona, de quien se presume, tenía una relación afectiva con la mujer de 65 años.

Barahona fue visto por testigos cuando abandonaba la casa de Hilda, abordaba su auto Fiat Mobi y se retiraba del lugar. El hombre fue detenido al día siguiente.

Se supo que trabajaba en una pizzería y que había engañado a Tobares, diciendo que en realidad se llamaba “Osvaldo”.

Además, descubrieron que mantenía una doble vida ya que el sujeto tenía una relación formal con otra mujer y además tenía hijos con ella.

Meses después, en julio de 2021, fue procesado por el juez Guillermo Adárvez con prisión preventiva por el delito de homicidio agravado por el vínculo. Dicho procesamiento, es relativamente reciente y a un mes de cumplirse un año del hecho la causa aún sigue tramitándose en el Tercer Juzgado de Instrucción.

Las vidas de Celeste, Pamela e Hilda fueron apagadas de manera violenta y los responsables aún no han sido juzgados. Pasa el tiempo y las familias de estas tres mujeres solo piden una cosa: pronta justicia.